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miércoles, 21 de diciembre de 2016

GÉNERO, DISCAPACIDAD Y EMPLEO

Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), la discapacidad es “toda restricción o ausencia debida a una deficiencia de la capacidad de realizar una actividad en la forma o dentro del margen considerado normal para el ser humano. Puede ser temporal o permanente, reversible o irreversible. Es una limitación funcional, consecuencia de una deficiencia que se manifiesta en la vida cotidiana. La discapacidad se tiene. La persona no es discapacitada, sino que está discapacitada.”
Para la Clasificación Internacional del Funcionamiento, de la Discapacidad y de la Salud, “la discapacidad denota los aspectos negativos de la interacción entre personas con un problema de salud y factores personales y ambientales, actitudes negativas, transporte y edificios públicos inaccesibles o falta de apoyo social.”
Según las estimaciones de la OMS, alrededor del 15% de la población mundial tiene discapacidad.
Por otra parte, la desigualdad de género es un fenómeno social y cultural en el que se presenta discriminación entre las personas a razón de su género, básicamente entre hombre o mujer y donde las desigualdades en el colectivo de personas con discapacidad son todavía más acentuadas.
Según datos de la Agencia de Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (USAID), la tasa de mortalidad en países en desarrollo, es superior en niñas y mujeres con discapacidad debido a la negligencia, la falta de atención médica y el acceso restringido a los alimentos o a los recursos relacionados.
En el Informe de Human Rights Watch “Mujeres y niñas con discapacidad” 2010, se indica que más de la mitad de las mujeres con discapacidad habían sido víctimas de abusos físicos frente a un tercio de las mujeres sin discapacidad.
Haciendo referencia al ámbito laboral y, según el estudio de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) realizado en 27 países, la tasa de empleo de las personas con discapacidad (44%) es 31 puntos inferior a la de las personas sin discapacidad (75%), y la tasa de inactividad era de un 49% en las personas con discapacidad frente a un 20% respecto a las personas sin discapacidad.
Las personas con discapacidad tienen más probabilidades de encontrarse en situación de desempleo y, cuando trabajan, ganan menos dinero que el resto de sus compañeros tal como indica la OMS en la Encuesta Mundial de Salud de 2011, donde se señala que las tasas de empleo son menores entre los varones y mujeres con discapacidad (53% y 20%, respectivamente) que entre los varones y mujeres sin discapacidad (65% y 30%).
Como conclusión, creemos que deben existir políticas y planes de igualdad en todos los ámbitos y sectores de la sociedad. Dentro de éstos se debe tratar de manera específica la discapacidad y realizar políticas y acciones específicas para la misma.

martes, 23 de agosto de 2016

CÓMO AFRONTÉ MI CAMBIO DE PERFIL LABORAL

A continuación presentamos 8 casos reales de personas que se han enfrentado a un cambio de perfil por no poder seguir trabajando en su profesión habitual y han tenido que empezar de cero.
La primera parte de los relatos, es un análisis personal de los miedos que se encontraron al adquirir la discapacidad. Como pueden ser: el shock inicial, la desorientación, el deterioro de la autoestima, la búsqueda de nuevas dianas profesionales, el apoyo emocional que recibe por parte de su orientador/a, etc.
La segunda parte, recoge los consejos que dan desde su experiencia.
Los relatos se presentan sin nombres para preservar el anonimato de las personas.
Taller TIC SOL16

Relato 1:
Cuando adquirí la discapacidad no supe cómo iba a seguir con mi vida. Mi experiencia laboral era de más de 25 años, y nunca me había planteado un cambio de profesión. Ahora considero que tuve mucha suerte con mi orientadora. Me ayudó a elegir las formaciones que más me convenían. Su ayuda fue fundamental porque vi que era capaz de acceder a otras profesiones. Realmente recibí muchos ánimos y ayuda que me motivaron a salir de casa, mantenerme ocupada, y ver que soy capaz de adaptarme a las nuevas tecnologías. Fue la fuerza que necesitaba para salir adelante.
En cuanto al consejo, el primero, es que hay luz después del túnel. Al principio estás muy perdida, sólo ves el poco tiempo que te queda de paro, que tienes 45 años y piensas que nadie te va a contratar sin experiencia.
El segundo, recomendaría no desmoralizarse porque si se es positivo y no se pierden las esperanzas, hay personas y entidades como ASPROM que ayudan durante todo el proceso.

Relato 2:
Al principio me angustie mucho, pensé que mi vida no sería igual que antes. Lo pasé, y lo sigo pasando, muy mal porque aún no he encontrado una profesión que pueda realizar.
En un primer momento me mandaban de un sitio para otro, y en algunos momentos me sentí muy desanimada pero seguí luchando.
Mi consejo sería invertir tiempo en formase, yo realicé varios  cursos de informática, eso me ayudó mucho a nivel emocional. A mis 60 años pienso que es muy importante reciclarse continuamente. De hecho, gracias a un curso fui contratada un tiempo como monitora de patio en un colegio.

Relato 3:
Mi experiencia fue dolorosa y tuve muchos miedos.
Una mañana me levanté para ir a trabajar y no pude, no me encontraba bien. Fui a urgencias y empezó una etapa de dudas e incertidumbres. Mi primer diagnóstico fue erróneo. Hasta meses después no lograron darme el diagnóstico real. Me dieron la baja médica y la empresa me despidió por "no superar el período de prueba". Pero en momentos así, lo que más te importa es tu estado de salud. Tenía miedo de no poder volver a mí vida de siempre,  no valerme por mí misma, a depender de los demás para el resto de mi vida.
Aun así comencé a estudiar una carrera universitaria, compaginando trabajo, y tratamientos médicos fuera. Logré normalizar mi vida pero 14 años después, se repitió el mismo episodio. Acudí a urgencias, me dieron la baja médica, y otra vez, la empresa me despidió. El INSS me concedió la incapacidad absoluta. Empecé una larga lucha en los tribunales hasta que me dieron la incapacidad total para la profesión habitual.
Una vez resuelto el tema de la discapacidad me sentí muy pérdida, aunque contenta porque la vida sigue. Ahora necesitaba aclarar cuáles eran mis nuevas dianas profesionales.
Como trabajadora con discapacidad me sentí abandonada por la administración pública hasta que di con ASPROM. Llegó a mí vida un rayo de luz.
Mi consejo para quién esté pasando por algo así, es aceptar tu situación lo antes posible y  aferrarse a la vida. Seguir trabajando para normalizar tu vida. Descubrí que en los trabajos que hice en el pasado adquirí conocimientos y habilidades que puedo desempeñar actualmente en otras ocupaciones…

Relato 4
A raíz de adquirir la discapacidad tuve miedo. Pensaba que no volvería a realizar mis actividades con normalidad nunca más. Me provocaba muchas limitaciones, mi vida cambió por completo. Me vi obligada a cambiar de profesión y no sabía hacia dónde dirigir mi futuro.
Mi consejo para las personas que estén pasando por lo mismo, es que no te cierres las puertas. Somos válidos para muchos otros trabajos que no conocemos. Es cuestión de mentalizarse y aceptar el problema que tenemos.  Adaptarnos a la nueva situación lo antes posible y tratar de formarse al máximo. La formación nos da la oportunidad de alcanzar nuevas profesiones y tener una nueva vida.

Relato 5
Cuando me diagnosticaron la discapacidad me sentó como un jarro de agua fría. Me sumergí en una depresión. Perdí 20 kilos. Con el tiempo entendí que no te tenía más remedio que aceptar la situación, la vida continúa.
Si tuviera que dar un consejo a alguien es que se reinvente, que siempre hay una salida para todo, pero aunque no es fácil, se consigue.

Relato 6
A día de hoy sigo sintiendo insatisfacción e impotencia. Veo que van pasando los y no encuentro un trabajo adecuado a mis necesidades. Es mi principal temor.
Mi recomendación es no cruzarse de brazos y buscar personas ayuden. Hay servicios como el de Asprom que te acompañan durante el proceso de búsqueda de trabajo.

Relato 7
Mi situación no me da miedo pero sí inseguridades. Principalmente pensar que tienes que empezar desde cero. Entiendo que al principio tendré que realizar trabajos de categorías inferiores para después ir progresando en la empresa. El mercado laboral actual no te da muchas oportunidades.
Primero recomendaría que intente aprovechar todas las oportunidades laborales que vayan saliendo. Es decir, que mientras logras el trabajo ideal, vayas haciendo trabajos que te acerquen al objetivo final.
Después recomendaría que se apunte a alguno de los servicios de inserción laboral para personas con discapacidad que hay como Asprom. Y seguir los consejos que te da tu orientador laboral. Echando currículos en empresas tienes más oportunidades de encontrar trabajo de tu perfil laboral. Al mismo tiempo,  hablar con amigos y conocidos que te puedan ayudar en tu búsqueda. También, o buscar por internet páginas de búsqueda de empleo, por último, es no venirme abajo por alguna mala experiencia y seguir buscando ya que no en todos los sitios laborables no encajas como te gustaría. ¡Estoy trabajando hace ya un año en la misma empresa donde me van a renovar durante otro!

Relato 8
Pensé que sin saber hablar otros idiomas de forma fluida me encontraría con muchos problemas para volver a encontrar trabajo. Cambiar de profesión sin tener experiencia laboral en otro sector también sería un obstáculo.
Mi consejo es que ante una situación así lo mejor es tener mucha confianza en mí misma y  no desanimarse cuando no encuentras trabajo, aunque hay bajones. Hay que ser positivos.

lunes, 27 de junio de 2016

GUÍA DE RECURSOS SOCIALES

Material actualizado: mayo 2016

Hola, a continuación os facilitamos una lista que reúne los principales recursos sociales de nuestro territorio.


·         RECURSOS DROGODEPENDENCIA

·         RECURSOS INMIGRACIÓN

·         RECURSOS OCIO Y TIEMPO LIBRE


·         RECURSOS ALIMENTICIOS




Nota: Ayúdanos a mejorar,  si conoces recursos que no aparecen háznoslo saber (971 289 052)